Las aplicaciones móviles de los bancos se han convertido en un aspecto fundamental de cómo las instituciones financieras se conectan y potencian todos los aspectos de su base de clientes. Según el estudio reciente realizado por Market Force, el 77% de los clientes cuyo banco les ofrece la opción de descargar una aplicación móvil, lo han llevado a cabo. Además, el estudio también concluyó que la tasa de adopción de estas apps se ha incrementado durante tres años consecutivos, y en todos los grupos de edad. Las personas se sienten cada vez más cómodas con la banca móvil y sus funcionalidades y capacidades, además, han permitido que bancos de todo el mundo lleguen a audiencias antes no explotadas.
Sin embargo, la banca móvil puede presentar riesgos de seguridad importantes en el caso de que se vean afectados por algún tipo de vulnerabilidad.
Por ello, es extremadamente importante que los bancos no solo trabajen para mantener sus aplicaciones seguras, evitando amenazas externas, sino que también consigan transmitir ese mensaje de seguridad a los clientes para calmar sus preocupaciones en este sentido, e incentivarlos a utilizarla habitualmente en sus operaciones bancarias.
Las siguientes tres mejoras en términos de seguridad (medibles y probadas), pueden convencer a tus clientes de que tu aplicación bancaria es segura y está lista para ser utilizada a largo plazo.
1. Explicar cómo estás protegiendo los datos
La mayor amenaza para la seguridad de las aplicaciones bancarias se encuentra en un cifrado débil de las comunicaciones entre dispositivos y servidores, un peligro del que los clientes están más concienciados que nunca.
La creación y la actualización constante del cifrado de datos no solo es crucial para garantizar aplicaciones seguras, sino que también permite que los usuarios se sientan más cómodos al considerar si deben usar la aplicación.
Existen numerosas formas en las que pueden producirse brechas de seguridad, incluido el tráfico de datos no seguro, el acceso al código fuente de la aplicación por parte de usuarios y el uso incorrecto por parte de los empleados que usan aplicaciones empresariales. Si bien es crucial que las empresas luchen contra estos problemas de seguridad a través del cifrado de datos, es igualmente importante que las medidas de seguridad sean bien comunicadas a los usuarios de la aplicación para incentivar su uso. La percepción que tienen los clientes de la seguridad de la aplicación puede ser reforzada a través de diversos métodos, entre ellos:
- Parches de aplicaciones ágiles: cuándo una app sufre una brecha de seguridad, la noticia llega rápido a sus usuarios. Y los fallos de seguridad son explotados por los hackers aún más rápido. Por eso, es fundamental que los desarrolladores reparen los fallos lo cuanto antes y de forma eficiente. Si hay cualquier tipo de preocupación sobre la seguridad de la aplicación, el equipo de software debe ser capaz de proporcionar respuestas y mitigar los temores en el menor tiempo posible, y antes de que el impacto sea mayor.
- Procedimientos de acceso: el acceso a la información de la aplicación puede ser un proceso frustrante para algunos usuarios, pero se trata de algo esencial para todas las aplicaciones que manejan informaciones financieras sensibles. Un sistema de acceso eficiente, robusto y consistente es, además de necesario, una manera de reforzar visualmente y a través de la experiencia de usuario la seguridad de la aplicación. Los sistemas de biometría, como puede ser la lectura de huellas dactilares, es un procedimiento ágil, además de seguro.
- Actualizaciones detalladas: cuando vayas a actualizar cualquier aspecto de tu aplicación bancaria, las notificaciones deberían detallar, en un lenguaje comprensible para el usuario, qué es lo que ha sido mejorado. De forma demasiado frecuente, las aplicaciones describen vagamente sus actualizaciones, causando confusión o, incluso, preocupación en usuarios que no entienden exactamente lo que estas actualizaciones significan. Si lo haces de una manera transparente y ofreces detalles del procedimiento, obtendrás exactamente el efecto contrario.
Aportar consistencia y transparencia en estas áreas resultará en una mayor confianza por parte de los usuarios y aumentará el uso de tu app en el largo plazo.
2. Ofrecer capacidades de borrado seguro de datos.
Para que los usuarios puedan acceder adecuadamente y de forma rápida a la información, evitando frustraciones, las aplicaciones móviles suelen almacenar una pequeña cantidad de datos y documentos en el dispositivo en el que están descargadas. Algo que ocurre también con las aplicaciones bancarias, que, debido a la naturaleza de la actividad del negocio, almacena datos cuya sensibilidad es mucho mayor que la mayoría y resto de aplicaciones.
Pero, ¿qué pasa si el dispositivo dónde están almacenados estos datos se pierde o es robado? Tener una clave de acceso al teléfono móvil no es suficiente para garantizar su protección cuando alguien consigue llevar a cabo un acceso indebido al dispositivo.
Así, el miedo a perder el móvil es suficiente para desanimar a muchas personas a descargar en sus móviles aplicaciones que contengan información sensible. Como tal, es crucial que los bancos ofrezcan medidas de seguridad avanzadas teniendo en cuenta la posibilidad de pérdida o hurto del smartphone, o de cualquier otro dispositivo móvil. Según detalla Appcelerator, la capacidad de borrar datos de forma segura en remoto puede permitir que se eliminen las informaciones más sensibles que contiene la aplicación en el caso de que se pierda el dispositivo, tranquilizando así a los usuarios. Esto evitará que los clientes vean en la aplicación bancaria un constante riesgo para la seguridad de su información, alentando y promoviendo así tanto la instalación de la misma como su uso.
Así, el hecho de contar con un acceso ágil, sencillo y seguro, así como la posibilidad de realizar un borrado de información remoto, dará a tus clientes una sensación de que sus finanzas están securizadas.
3. Controlar las transacciones móviles de alto riesgo
Las aplicaciones móviles deben permitir que sus usuarios ejecuten una gran variedad de acciones para demostrar su importancia y valor en el día a día del cliente. Así, las apps que tienen en cuenta factores de riesgo como puede ser: la seguridad, la geolocalización o la seguridad de la conexión en la red, pueden evitar que algunos usuarios realicen acciones que puedan poner en riesgo sus informaciones. De esta manera los clientes sentirán que los bancos trabajan activamente para proteger sus datos.
Según Dark Reading, algunos de los comportamientos de los usuarios que les puede poner en riesgo y que las aplicaciones bancarias deberían prevenir son:
- Transacciones realizadas en horarios o ubicaciones sospechosos o poco comunes en el usuario
- Dispositivos afectados por virus u otros problemas de seguridad
- Transacciones financieras más altas que de costumbre
- Finalización de procesos a través de conexiones a redes no seguras
Los usuarios de aplicaciones móviles desean tener un determinado grado de libertad y cuando se enfrentan a algunas restricciones de uso pueden tener la tentación de abandonar la app. Sin embargo, cuando estas restricciones son mostradas al usuario como resultado del trabajo activo por parte del banco de cara a garantizar el bienestar de sus clientes, los usuarios de la aplicación sentirán que las instituciones financieras están cuidando de ellos, y no les están dejando abandonados a su suerte. Cuando se consigue ese equilibrio, el resultado es la creación de un vínculo más fuerte entre el banco y el cliente, más personal, generando un aumento de la fidelización.